Los diuréticos, también llamados píldoras de agua, son un tratamiento común para la presión arterial alta. Averigua cómo funcionan y cuándo podrías necesitarlos.

Escrito por el personal de Mayo Clinic

Los medicamentos que ayudan a reducir la acumulación de líquido en el cuerpo se denominan diuréticos. La mayoría de los diuréticos ayudan a los riñones a eliminar sal y agua a través de la orina. Esto reduce la cantidad de líquido que fluye por las venas y arterias. Como resultado, la presión arterial baja.

Los tipos de diuréticos utilizados para tratar la presión arterial alta incluyen:

  • Tiazida.
  • Diuréticos del asa.
  • Ahorradores de potasio.

Algunos diuréticos combinan más de un tipo de estas sustancias. Otros combinan un diurético con un medicamento diferente, como uno para tratar la presión arterial. El tipo más adecuado para ti depende de tu estado de salud y de la enfermedad que se esté tratando.

Algunos ejemplos de diuréticos tiazídicos son:

  • Clorotiazida.
  • Clortalidona.
  • Hidroclorotiazida.
  • Indapamida.
  • Metolazona.

Algunos ejemplos de diuréticos del asa son:

  • Bumetanida (Bumex).
  • Ácido etacrínico (Edecrin).
  • Furosemida (Lasix).
  • Torasemida (Soaanz).

Algunos ejemplos de diuréticos ahorradores de potasio son:

  • Amilorida (Midamor).
  • Eplerenona (Inspra).
  • Espironolactona (Aldactone, Carospir).
  • Triamtereno (Dyrenium).

Los diuréticos tiazídicos se recomiendan como uno de los primeros medicamentos para tratar la presión arterial alta.

Si los diuréticos no bastan para bajar la presión arterial, puedes recibir medicamentos adicionales.

Los diuréticos también se utilizan para prevenir, tratar o mejorar los síntomas de las personas que tienen:

  • Insuficiencia cardíaca.
  • Insuficiencia hepática.
  • Acumulación de líquido en el cuerpo.
  • Ciertos trastornos renales, como cálculos renales.

En general, los diuréticos son seguros. Los efectos secundarios incluyen:

  • Orinar con más frecuencia.
  • Muy poco sodio en la sangre.
  • Muy poco potasio en la sangre.

Los diuréticos tiazídicos pueden causar niveles muy bajos de potasio, lo que se denomina hipocalemia. La hipocalemia puede causar problemas de ritmo cardíaco potencialmente mortales. Para evitar la pérdida de potasio, se te puede administrar un diurético ahorrador de potasio. Tu equipo de atención médica comprobará tus niveles de potasio si tomas estos medicamentos.

Otros posibles efectos secundarios de los diuréticos son:

  • Mareos.
  • Dolores de cabeza.
  • Deshidratación.
  • Calambres musculares.
  • Un tipo de artritis conocida como gota, que causa fuertes dolores articulares, generalmente en el dedo gordo del pie.
  • Problemas de erección, también llamados disfunción eréctil o impotencia.

Habla con tu equipo de atención médica si tienes alguna duda sobre los medicamentos que tomas.

Dec. 28, 2023