Diagnóstico

Las pruebas y procedimientos usados para diagnosticar la hepatitis tóxica comprenden lo siguiente:

  • Exploración física. El médico probablemente te realizará una exploración física y recopilará tu historia clínica. Asegúrate de llevar a la consulta todos los medicamentos que estés tomando, entre ellos, los medicamentos de venta libre y hierbas, en su recipiente original. Informa al médico si trabajas con sustancias químicas industriales o si estuviste expuesto a pesticidas, herbicidas u otras toxinas ambientales.
  • Análisis de sangre. El médico puede solicitar un análisis de sangre para observar si hay altos niveles de determinadas enzimas hepáticas. Estos niveles de enzimas pueden demostrar qué tan bien funciona tu hígado.
  • Pruebas de diagnóstico por imágenes. Tu médico puede recomendar una prueba por imágenes para crear una imagen de tu hígado usando una ecografía, tomografía computarizada o imágenes por resonancia magnética. Otras pruebas de imagen adicionales pueden incluir la elastografía magnética y la elastografía transitoria.
  • Biopsia de hígado. Una biopsia de hígado puede ayudar a confirmar el diagnóstico de hepatitis tóxica y a excluir otras causas. Durante una biopsia de hígado, se utiliza una aguja para extraer varias muestras de tejido del hígado. La muestra se examina debajo de un microscopio.

Tratamiento

Los médicos trabajarán para determinar qué está causando el daño hepático. Algunas veces, es claro qué está provocando tus síntomas y otras veces toma más trabajo de investigación para detectar una causa. En muchos casos, suspender la exposición a la toxina que provoca la inflamación del hígado reducirá los signos y síntomas que presentas.

Los tratamientos para la hepatitis tóxica pueden comprender lo siguiente:

  • Atención complementaria. Las personas con síntomas graves probablemente reciban terapia complementaria en el hospital, como líquidos y medicamentos para aliviar las náuseas y los vómitos. El médico también controlará el daño hepático.
  • Medicamentos para revertir el daño hepático provocado por acetaminofeno. Si el daño a tu hígado fue causado por una sobredosis de acetaminofeno, recibirás de inmediato una sustancia química llamada acetilcisteína. Cuanto más rápido se administre este medicamento, mayor será la probabilidad de limitar el daño hepático. Es más eficaz si se administra en las 16 horas posteriores a la sobredosis de paracetamol.
  • Atención de emergencia. Para las personas que han tomado una sobredosis de un medicamento tóxico, la atención de emergencia es esencial. Las personas que toman una sobredosis de ciertos medicamentos distintos al acetaminofeno pueden beneficiarse de tratamientos para eliminar el medicamento ofensivo del cuerpo o reducir su efecto tóxico.
  • Trasplante de hígado. Cuando la función hepática está gravemente afectada, un trasplante de hígado puede ser la única opción para algunas personas. Un trasplante de hígado es una operación para extirpar el hígado enfermo y reemplazarlo con un hígado saludable de un donante.

    La mayoría de los hígados usados en los trasplantes de hígado provienen de donantes fallecidos. En algunos casos, los hígados pueden provenir de donantes en vida que donan una parte de sus hígados.

Preparación para la consulta

Comienza por ver a tu médico de cabecera o médico general si tienes algún signo o síntoma que te preocupe. Si se sospecha que tienes un problema hepático, como una hepatitis tóxica, es probable que te deriven a un especialista del hígado (hepatólogo).

Debido a que las consultas pueden ser breves y casi siempre hay mucho para hablar, es aconsejable estar bien preparado. A continuación, te proporcionamos información que te ayudará a prepararte y saber qué esperar de tu médico.

Qué puedes hacer

  • Ten en cuenta cualquier restricción previa a la consulta. Cuando programes la consulta, asegúrate de preguntar si hay algo que debas hacer con anticipación, como restringir tu dieta.
  • Anota los síntomas que se presenten, incluidos aquellos que quizás no parezcan relacionados con el motivo de la consulta.
  • Anota información personal clave, como episodios de estrés importantes o cambios recientes en tu vida.
  • Haz una lista de todos los medicamentos, las vitaminas o los suplementos que tomes.
  • Pídele a un familiar o a un amigo que te acompañe. En ocasiones, puede ser difícil recordar toda la información que se proporciona durante una consulta. La persona que te acompañe puede recordar algún detalle que hayas pasado por alto u olvidado.
  • Escribe preguntas para hacerle al médico.

Estas son algunas preguntas básicas que puedes hacerle a tu médico si tienes hepatitis tóxica:

  • ¿Qué podría estar provocando mis síntomas o mi afección?
  • ¿Existen otras causas posibles de mis síntomas o mi afección?
  • ¿Podría uno de los medicamentos que tomo ser responsable del daño a mi hígado?
  • ¿Mi hígado está dañado?
  • ¿Qué tipo de pruebas necesito hacerme?
  • ¿Es probable que mi trastorno sea temporal o crónico?
  • ¿Cuáles serían las mejores medidas para tomar?
  • ¿Cuáles son las alternativas al enfoque principal que me indica?
  • Tengo otros trastornos de salud. ¿Estos trastornos o su tratamiento afectarán el resultado de la hepatitis tóxica? ¿Cómo puedo controlarlos de la mejor manera?
  • ¿Debo respetar alguna restricción?
  • ¿Debería consultar con un especialista? ¿Cuánto costará? ¿Lo cubrirá mi seguro?
  • ¿Existe alguna alternativa genérica al medicamento que me receta?
  • ¿Hay algún folleto u otro material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web me recomienda?
  • ¿Qué determinará si debo programar una visita de seguimiento?

Además de las preguntas que hayas preparado para hacerle a tu médico, no dudes en hacer más preguntas durante la consulta en cualquier momento.

Qué esperar del médico

Es probable que el médico te haga varias preguntas. Estar listo para responderlas puede dejarte más tiempo para tratar los puntos que quieres abordar. El médico podría hacerte estas preguntas:

  • ¿Cuándo comenzaste a tener los síntomas?
  • ¿Los síntomas han sido continuos u ocasionales?
  • ¿Cuán intensos son los síntomas?
  • ¿Existe algo que, al parecer, mejore los síntomas?
  • ¿Existe algo que, al parecer, empeore los síntomas?
  • ¿Qué medicamentos recetados o de venta libre estás tomando? ¿Comenzaste algún nuevo medicamento recientemente?
  • ¿Tomas acetaminofeno?
  • ¿Tomas hierbas o suplementos nutricionales?
  • ¿Cuánto alcohol bebes y con qué frecuencia?
  • ¿Notaste un color amarillento en la parte blanca de tus ojos?
  • ¿El color de la orina parece más oscuro?
  • ¿Hay alguien en tu familia con antecedentes de enfermedad hepática?