Si no tienes espinaca, usa brócoli, espárragos, ejotes o col rizada salteada.
Calienta el horno a 400 °F (200 °C). Recubre ligeramente una bandeja de horno con aceite en aerosol, déjala a un lado.
En un bol pequeño, mezcla el pan rallado, el perejil, la cebolla en polvo, el ajo en polvo, el pimentón, la sal y la pimienta. En otro bol pequeño, agrega el sustituto del huevo.
Machaca cada pechuga de pollo de un espesor uniforme con un mazo para carne y extiéndelas sobre una tabla de cortar. Coloca una rebanada de queso de 1/2 onza (14 g) sobre cada pechuga de pollo, más una rebanada de 1/2 onza (14 g) de tocino canadiense y 1/4 de taza de espinacas salteadas.
Enrolla cada pechuga con fuerza. Sumérgelas en el sustituto del huevo y luego cúbrelas con la mezcla de pan rallado. Coloca las pechugas recubiertas en la bandeja de horno y hornea de 20 a 25 minutos o hasta que la temperatura interna alcance los 165 °F (75 °C).
Creada por el cocinero ejecutivo para el bienestar y los dietistas matriculados del Healthy Living Program (Programa para una Vida Saludable) de Mayo Clinic.
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